A medida que pasa el tiempo, aumentan los tipos de suplantación de identidad. Este delito consiste en hacerse pasar por otra persona para cometer algún tipo de fraude, obtener datos de manera ilegal, hacer ciberbullying, grooming, entre otros.
En la actualidad, debido a las facilidades que ofrece el internet, esta práctica se ha expandido por todo el mundo. No obstante, cabe destacar que España es el lugar donde se registran más casos de suplantación de identidad dentro de la Unión Europea, según la Oficina Europea de Estadística.
Tipos de suplantación de identidad
Los principales tipos de suplantación de identidad son:
- Malware: se trata de bots, rootkits y virus que los delincuentes usan para extraer información personal de los archivos de un ordenador y así realizar la usurpación de identidad. Normalmente, se utiliza un malware (spyware) capaz de espiar el equipo y obtener información actualizada de la identidad de las víctimas. Asimismo, mediante programas conocidos como ransomware, los ladrones pueden encriptar la información personal de la víctima y luego pedir un rescate por ella.
- Engaño: los ladrones utilizan métodos como el phishing, el spoofing y el Correo Electrónico Empresarial Comprometido (BEC, por sus siglas en inglés) que consisten en usar información disponible en línea para elaborar comunicaciones que parezcan reales y así engañar a las víctimas. Eso se puede hacer reuniendo información personal para llevar a cabo la suplantación de identidad (phishing) o iniciando dicho delito con información de empresas reconocidas para generar confianza (spoofing). Ambos métodos se pueden combinar para lanzar ciberataques a las empresas y apoderarse de su red.
- Formas de pago: este fraude suele empezar con el robo de información mediante el skimming en cajeros automáticos, que permite al usurpador de identidad utilizar las tarjetas de crédito o débito para robarle dinero a la víctima y realizar compras presenciales y en línea (tarjeta presente y tarjeta no presente).
- Número de seguridad social: si el delincuente cuenta con esta información personal, la puede usar para propósitos médicos, ya que puede recibir atención médica u obtener medicamentos recetados en nombre de la víctima. Del mismo modo, puede solicitar reembolsos de impuestos fraudulentos e incluso utilizarla cuando haya cometido alguna ilegalidad (multas o arrestos), lo cual perjudicaría los registros de la víctima.
- Datos personales: entre los tipos de suplantación de identidad este es el más delicado. Los ladrones pueden conseguir la información personal a través de phishing, malware o spyware, lo cual puede acarrear la suplantación de identidad en redes sociales o, en el peor de los casos, la adquisición de los datos bancarios para robar dinero.
¿Qué actos se consideran un delito de suplantación de identidad?
La suplantación de identidad es un delito y está penado por la justicia, pero cada jurisdicción determina de forma distinta las penas al respecto. En ese sentido, nuestro sistema legal en España cuenta con una pena por suplantación de identidad de seis meses a tres años de prisión, tal y como se refleja en el artículo 401 del Código Penal.
Esta pena por suplantación de identidad se aplica a aquellas personas que usurpan el estado civil de otro (indiferentemente de si está vivo o muerto), es decir, que se apropian de los diferentes aspectos que integran la identidad humana, como pueden ser documentos de identificación, cuentas digitales o el aspecto físico.
¿Qué pena conllevan los diferentes tipos de suplantación de identidad?
Algunos tipos de suplantación de identidad son condenados por el Código Penal, en función del perjuicio que los actos del infractor provoquen en la víctima. Esto significa que la sanción y la multa por suplantación de identidad estarán sujetas a la gravedad de los hechos presentados en el proceso judicial.
Por ejemplo, algunas penas en función de los tipos de suplantación de identidad son las siguientes:
- De 6 meses a 3 años de prisión por suplantación del estado civil (artículo 401).
- De 3 a 5 años de prisión por acceder y apoderarse ilegalmente de datos personales (artículo 197).
- De 1 a 3 años de prisión por hacerse pasar por funcionario público.
¿Cómo pueden suplantar la identidad?
Los diferentes métodos de suplantación de identidad en internet señalados anteriormente son bastante fáciles de ejecutar por parte de los ciberdelincuentes. Por lo tanto, el simple hecho de que un usuario particular deje un rastro valioso de su identidad en redes sociales (como números de documentos de identidad, dirección fiscal, correo electrónico, etc.) o de que las empresas no cuenten con un software de verificación de identidad, crea una brecha de seguridad que le permite al delincuente efectuar prácticamente cualquiera de los tipos de suplantación de identidad con facilidad.
¿Cómo saber si están utilizando nuestros datos personales?
Por desgracia, en la mayoría de los casos, la víctima se dará cuenta del robo de sus datos cuando el ladrón ya los haya usado para sus actividades ilícitas, es decir, cuando las consecuencias de la suplantación de identidad repercutan en sus registros y, por ende, en su vida cotidiana.
¿Cómo solucionar la suplantación de identidad?
Si el robo ocasionó problemas bancarios, fraudulentos o legales, la víctima deberá reunir la evidencia pertinente que demuestre su inocencia ante esos hechos y permita una indemnización por suplantación de identidad (en el caso bancario). La operación a realizar es la misma para solucionar la suplantación de identidad en documentos, acuerdos, etc.
¿Cómo prevenir los tipos de suplantación de identidad?
Para prevenir los tipos de suplantación de identidad es conveniente tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Nunca compartir datos personales, cuentas corrientes y contraseñas en espacios públicos o páginas web.
- Evitar guardar contraseñas en dispositivos electrónicos, ya que, si estos son hackeados, serán fácilmente adquiridas por el delincuente.
- No abrir ningún archivo o enlace de algún correo de desconocidos o que parezca sospechoso.
- Comprar por internet de forma segura utilizando una tarjeta de crédito con un sistema de alerta, para que mediante un SMS o un email el banco pueda notificarnos acerca de los movimientos que se hacen con ella.
- Poner en marcha un programa de seguridad para proteger la base de datos de la empresa.
- Optimizar al máximo todo el proceso KYC de la empresa para garantizar la identidad verificada de los clientes.
- Utilizar un sistema de verificación de identidad digital fiable como Silt.
El delito de suplantación de identidad es un problema del que cualquier persona o empresa puede ser víctima, si no toma las medidas pertinentes. Por esa razón, muchas empresas están empezando a hacer uso de sistemas avanzados de verificación de identidad como Silt. Gracias a su tecnología biométrica, se genera confianza en el usuario para que proporcione información valiosa a la página web de la empresa, sin la preocupación de que una persona externa pueda acceder a sus datos y cometer alguno de los distintos tipos de suplantación de identidad.
There are no comments
Leave a comment